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Gastos médicos y dentales: ¿qué tal el seguro?
No se puede negar: la edad a veces conlleva costos de atención de salud más altos y catastróficos. Algunas opciones continúan con su empleador
o utilizan varios planes de atención médica disponibles a través del gobierno, la Asociación Americana de Personas Jubiladas (AARP), compañías de seguros e instalaciones como Organizaciones de Mantenimiento de la Salud (HMO).
El gobierno de los Estados Unidos ha estado examinando varias opciones de reforma de la atención médica. Si la legislación desarrolla algún programa, las opciones para su jubilación podrían modificarse drásticamente. Debe realizar un seguimiento de la legislación y las leyes que afectan su jubilación.
Medicare cubre aproximadamente el 40% de los gastos de atención médica para personas jubiladas. La cobertura de salud complementaria puede estar disponible para usted durante la
jubilación a través del seguro de salud grupal de su empleador o grupos de personas mayores como AARP.
Otros tipos de seguro
Incluso durante la jubilación, necesitará protección de seguro para su automóvil, hogar y propiedad personal, así como un buen seguro de salud.
Transporte: ¿cómo va a moverse?
¿Debería usar transporte privado o público cuando se jubile? Hay beneficios para ambos. Compare el costo y el compromiso que conlleva tener un automóvil privado con el costo y la conveniencia del transporte público. Es posible que no siempre pueda conducir usted mismo.
Alimentos, ropa y artículos personales
Es probable que viva con un ingreso fijo durante la jubilación. Deberá tener cuidado con sus gastos de comida, ropa y artículos personales. Puede utilizar prácticas frugales como cupones de descuento, productos genéricos de marca, ventas de compras y compras a granel.
Julie podía oler un estante de liquidación a una milla de distancia. Podía hacer cálculos a la velocidad de la luz, calculando un 15%, 30% o 50% de descuento en cualquier precio. Tenía una extraña habilidad para detenerse en la tienda correcta, en el momento correcto, con exactamente los cupones correctos.
¡El desafío de obtener el mejor trato posible fue estimulante y divertido!
Cuando su esposo se retiró, Julie no tuvo que hacer un cambio importante en sus hábitos de gasto, por lo que la transición fue más fácil. Su plan de gastos era un poco más estricto, pero ella siempre había gastado con cuidado. Compró los productos que le gustaban, pero fue lo suficientemente inteligente como para comprarlos al mejor precio que pudo encontrar. Una vida de buenos hábitos financieros vale la pena.
80 Libro 3: Preparase para el futuro